Hoy, como casi todos los mediodías
de este ultimo año, desplazo toda mi masa corporal en dirección al chigre para
que mi cuerpo se meza en el placer del buen vino acompañado por una buena
lectura periodística o en caso de que no esté ninguno de los “EL COMERCIO” libre
apañármelas con la burda gacetilla de “la nueva España”. Para mi desconsuelo me
toco la segunda así que apure el primer
vino, pedí otro y comencé con parsimonia de jubilado de correos a desgranar los
racimos de información para ver cual atacaría primero y cual después.
La lotería le toco a que
en Asturias nos estamos quedando solos,
se van los emigrantes que llegaron en pos de la quimera del oro del
ladrillo y se van nuestros ingenieros y demás personal que no encuentra ni un
triste empleo que llevarse a las manos. Hablan de que en Asturias perderá en menos de 10 años 52.000 habitantes
por la baja natalidad y el parón de la emigración y si a esto le sumamos que un
40% de la población pasa de los 50 años el futuro para nosotros se torna
oscuro, feo y con tintes de tragedia griega.
Mientras tanto nuestros
políticos sigue jugando a sus guerras particulares, a mostrase los dientes del
poder al vecino aunque sea este de su mismo partido haciendo oídos sordos a la
voz del pueblo que tanto nos vendieron en las elecciones pero no explicaron que
después no habría oídos para escuchar sus peticiones y trailaralarita yo tengo
una casita con mucha tradición pues era de mi abuela el huevo de colon.
Muy buenas noches a
todos y que sueñen con un mundo donde la voz del pueblo deje de ser espuma de
mar.
El Hefas.- aldeanu de
pro